
Si os digo la verdad,
antes de comprar este segundo tomo, iba un poco a ciegas, porque quería que la
autora me sorprendiese. Cuando tuve el ejemplar en mis manos y leí su resumen
me quedé con una cara de boba… Vamos, para sacarme una foto en ese momento je,
je.
Antes de contaros mi
opinión sobre “Los Ritos del Agua” os escribiré un breve resumen para que
sepáis de qué trata la historia. Por un lado, Ana Belén Liaño, la primera novia
de Kraken, aparece asesinada. La mujer estaba embarazada y ha sido ejecutada
según un ritual de hace 2.600 años: quemada, colgada y sumergida en un caldero
de la Edad del Bronce. Por otro lado, en 1992, Unai y sus amigos de cuadrilla
trabajan en la reconstrucción de un poblado cántabro. Allí conocen a una
misteriosa dibujante de cómics, a la que los cuatro consideran su primer amor.
En la actualidad, en el 2016, Kraken debe detener a un asesino que imita los
Ritos del Agua en lugares sagrados del País Vasco y Cantabria, cuyas víctimas
son personas que esperan un hijo. Pero hay más, ya que estos crímenes pueden
afectar personalmente a Kraken, ya que la subcomisaria Díaz de Salvatierra está
embarazada, y sobre su paternidad se cierne una duda de terribles
consecuencias…