"Retorno a Roma" de Alicia Padrón

¡Buenas tardes, lectores! ¿Qué tal estáis? Hoy miércoles os voy a dar mi opinión sobre un libro que ha sido otro de los grandes descubrimientos de este año. Se trata de Retorno de Roma de Alicia Padrón. Quiero, antes de comenzar la reseña, dar las gracias a la editorial Adarve por cederme un ejemplar del mismo y pediros disculpas a vosotros, lectores, porque ando con ciertas dificultades que me impiden leer y reseñar al ritmo habitual.

¿De qué trata este magnífico ejemplar? La historia comienza con Julia, una joven profesora universitaria cuya vida atraviesa una fase complicada. En un momento decisivo acepta un trabajo muy peligroso que la llevará a destinos sorprendentes y determinará que su vida se cruce con quien, desde el pasado, marca su existencia. El encuentro con otro personaje tan distinto, con un magnicidio como trasfondo, tendrá consecuencias en el destino de Julia y, quizás, en el de toda la humanidad. El resumen es llamativo, ¿verdad? Recuerdo que cuando lo leí, despertó por completo mi curiosidad, ya que la información que la sinopsis ofrece me pareció muy intrigante...

Lo primero que quiero destacar es la forma en la que Alicia Padrón narra la trama. En realidad nos encontramos ante dos historias cuya autora las redacta de forma soberbia. La primera, redactada en tercera del pasado siendo un narrador omnisciente quien cuenta la trama, se ubica en un tiempo indeterminado en el presente donde nos muestra la situación personal de Julia y los motivos que le lleva a aceptar un trabajo tan misterioso y arriesgado tanto para ella y porqué no decirlo, también para la humanidad. La otra trama se ambienta en Roma entre los años 45- 44 a. C. en la que descubriremos a un personaje histórico tan importante, cuyo legado permanece en nuestros días, y que gracias a la excelente construcción narrativa de la autora, se aprenderán muchísimas cosas de él y de la maravillosa ciudad de Roma. Destaca de nuevo el narrador omnisciente en la trama y el uso del presente en primera y segunda persona del singular en los diálogos.

Añadido a lo anterior llama la atención la magnífica ambientación que ambas narraciones presentan, siendo más detallada y precisa la que sucede en la capital italiana. Todos los aspectos que suceden en ella se viven, se sienten, se paladean. Yo no he estado en ella, pero gracias a Alicia, he conocido a la perfección esta ciudad y sobre todo la gran urbe que latía a mediados del siglo I a. C. Es absolutamente increíble la forma de plasmar todo este conocimiento dentro de una novela, y que ésta se lea de una forma tan fluida como Retorno a Roma, permite disfrutar y aprender por igual.

A su vez, otro elemento importante son las descripciones que se suceden a lo largo del tomo, ya sean de los aspectos actuales, como de los pasados. No hay nada que esta escritora pase por alto. Su minuciosidad por el detalle, ya sea para describir una prenda o el estilo que presenta una determinada columna roza la perfección absoluta y me ha dejado absolutamente asombrada y admirada. 

Se suele pensar que las novelas de este género suelen ser aburridas y algo plomos, ¿verdad? Pues estáis totalmente equivocados ¡Es una obra de la que nunca te cansas y que siempre quieres seguir leyendo! Si os digo la verdad me faltaba tiempo para leerla, aprovechaba cualquier momento por pequeño que fuera para avanzar en una historia trepidante. 

Inicialmente la novela presenta un ritmo narrativo un tanto heterogéneo, ya que cuando uno comienza a leerlo, se introduce en una historia más o menos común y se desarrolla de forma lenta y detallada. Pero a partir de la página 30 los acontecimientos presentan un giro tan drástico y fundamental que provocará dos efectos: el primero es que aumente la velocidad narrativa dentro del libro y el segundo y más importante, es que el lector quiera devorar este ejemplar, queriendo saber qué va a suceder después. Por cierto, os aviso, el final, es de auténtico infarto. 

El tomo se organiza en 54 capítulos, que no presentan numeración como tal, sino que se identifican a partir de títulos. Estos capítulos tienen una extensión variable, algunos de ellos son algo extensos pero no por ello se hacen pesados. A su vez, hay algunos que se encuentran fechados, para reconocer en qué periodo sucede la trama. 

Al mismo tiempo, es muy importante destacar la sencillez con la que la autora redacta esta obra. Su lenguaje es coloquial y aunque emplee ciertos tecnicismos, estos se explican a lo largo de ese mismo capítulo facilitando su comprensión. 

Por otro lado, es un ejemplar del que se aprenden numerosas curiosidades sobre tradiciones, ritos, economía, cultura y festividades (muchas de ellas tomada por la Iglesia católica) del periodo romano. En este ejemplar se percibe perfectamente la trascendencia y la importancia de este Imperio, cuya influencia queda todavía en numerosos elementos de nuestra cultura. 

Pero, ¿qué sería de Retorno a Roma sin sus personajes? En el resumen os he hablado de la protagonista principal: Julia de Marzo. Esta mujer es quien lleva toda la carga de la obra y que gracias a su valentía protagoniza una historia llena de acción y mucho misterio. La autora se encarga de describir el más mínimo detalle de Julia, ya sea su aspecto físico, su vestimenta, o los rasgos psicológicos, favoreciendo la conexión y la empatía entre personaje y lector... Hay que decir que, nuestra protagonista es alguien que a pesar de no pasar un buen momento personal, es fuerte y decidida, con una personalidad fuera de lo común. Es una gran profesional, y esa virtud, la he visto en ciertos puntos de la historia como un defecto, porque he llegado a echar de menos algún rasgo de humanidad y sensibilidad, que lógicamente aflorará posteriormente.  Pero no sólo Julia protagoniza esta novela, hay otros personajes muy importantes, pero sobre todo uno es muy, muy destacable. No quiero deciros quien es, matadme, pero quiero que leáis esta obra y que descubráis porqué os dejo con la intriga... El resto de personajes forman un conjunto magnífico y perfectamente organizado por la autora, que hará que paséis momentos de verdadera alegría, placer y por que no decirlo, de verdadera angustia. 

Quiero destacar la originalidad de este tomo, ya que nos ofrece una perspectiva muy diferente de lo que pudo haber sucedido y las consecuencias que podría haber tenido dentro de la Historia Universal. 

También, quiero hacer especial mención a la labor de investigación de Alicia Padrón. Honestamente, plasmar todo este conocimiento tan detallado en una obra de este calibre es digno de admirar. Sinceramente, le doy mi más sincera enhorabuena. 

Quiero finalizar esta reseña, lanzando una breve reflexión ¿Son nuestras decisiones capaces de cambiar el destino del mundo? Igual es una exageración, pero con cada respuesta, con cada afirmación o negación, optamos, elegimos realizar un acto, o tomar un determinado camino. Estos aspectos nos afectan como indiciduos, pero también pueden influir en nuestra pareja, en nuestros amigos o familiares e incluso en un colectivo ¿Lo hacemos para bien? ¿Para mal? Nunca lo sabremos. La vida se descubre a base de errores, dudas e incertidumbres. Pero lo que hay que tener claro es que hay que vivir intensamente, siendo conscientes de que nuestros actos siempre, siempre, tendrán consecuencias ¿Serán buenas? ¿Serán malas? El tiempo lo dirá ¡Feliz tarde a todos!

¡Nos seguimos leyendo, lectores! ^^

- Ediciones y precios del libro

Tapa blanda (Ediciones Áltera, 474 págs, 2017): 19 €
E-book (Ediciones Áltera, 2017): 4'99 €

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- La autora

Alicia Padrón es doctora en medicina, profesión que desempeña en la actualidad, dedicada a investigaciones científicas. 

En este sentido ha publicado múltiples artículos en prestigiosas revistas y colabora con publicaciones de relevancia internacional. Paralelamente, y desde muy joven, ha escrito inspirados relatos llevada por su profunda fascinación por la Roma y Grecia clásicas, de cuyos yacimientos arqueológicos es una consumada experta. Conocimiento y fascinación eclosionan en esta obra.