¡Muy buenas tardes, lectores! ¿Cómo os encontráis?
Espero que bien y que ya estéis ultimando los pequeños detalles para estas
fechas tan señaladas. Después de tanto tiempo sin reseñar “vuelvo a casa por
Navidad”, como diría aquel anuncio de turrones. Tengo que reconocer que he
dejado el blog de lado durante un tiempo. Como conté en la entrada anterior,
estoy con otros proyectos en mente y también, siendo honesta he querido poner
algo de distancia para tomarlo con más ganas y también con más calma. Mi ritmo
de lectura ha disminuido y, por lógica, la cantidad de obras a reseñar.
Sinceramente, para leer mal un libro y hacer una mala reseña, prefiero no
hacerlo. Por respeto al autor y a su obra. Y también porque creo que el trabajo
se debe hacer bien. Por ese motivo he parado. Iré leyendo y reseñando poco a
poco. No hay fecha de vuelta. Tampoco me he ido, en realidad. Estoy, pero de
otra manera.
Tras la reseña de El duende negro de J. R. Corch, no pensaba hacer más entradas para
este año. Pero, cosas del destino, recientemente me regalaron por mi aniversario
un libro que no esperaba: Reina Roja de
Juan Gómez-Jurado. Es el típico libro que tienes muchas ganas de leer, porque conoces
otras obras del autor y sabes que va a ser la bomba, pero asumes que lo harás bastante
más tarde. La cara de sorpresa y de alegría cuando vi el libro fue increíble y
además, ¡estaba dedicado por el autor! La ilusión era doble. Y no os imagináis
las ganas de leerlo y sobre todo, de reseñarlo.
Tengo que contaros muchas cosas y como es habitual,
primero, voy a resumir brevemente la
obra. Antonia Scott es especial. Muy especial. No es policía ni criminalista.
Nunca ha empuñado un arma ni llevado una placa y, sin embargo, ha resuelto
decenas de crímenes. Pero hace un tiempo que Antonia no sale de su ático de
Lavapiés. Las cosas que ha perdido le importan mucho más que las que esperan
ahí fuera. Tampoco recibe visitas. Por eso no le gusta nada, nada, cuando
escucha unos pasos desconocidos subiendo las escaleras hasta el último piso.
Sea quien sea, Antonia está segura de que viene a buscarla. Interesante,
¿verdad? Pues si esto os ha llamado la atención, preparaos que vienen curvas.
Comienzo haciendo referencia a la estructura del libro. Este se organiza
en 3 grandes bloques titulados, cada
uno, con el nombre de 3 personajes que aparecen en el tomo. A su vez, cada
bloque, se subdivide en varios capítulos,
algunos numerados y otros, de nuevo, titulados con un nombre propio de persona.
Al mismo tiempo, los capítulos son
breves. Su extensión no supera las 4 o 5 páginas. Eso sí, que su brevedad no os
engañe. Parece que el autor no nos va a contar mucho, pero siempre aporta un
nuevo dato que nos servirá para resolver el desaguisado que hay. Y es que es un
auténtico rompecabezas el que el autor propone en su Reina Roja, teniendo varias historias que confluyen en una sola,
desarrollándose a un ritmo vertiginoso.
Al mismo tiempo, el narrador que nos cuenta esta novela es un narrador omnisciente, que desarrolla en tercera persona del
presente todo lo que le sucede a los dos protagonistas. Sí. Protagonistas. En
este tomo, quien destaca es Antonia
Scott, pero hay un hombre que también toma partido. Se trata de Jon Gutierrez.
Inicialmente, la manera en la que el autor presenta a Antonia es bastante excéntrica, ya que se asemeja mucho a alguien “al borde de un ataque de
nervios” o del colapso mental. Y sobre todo que no es alguien común. Es
especial. Es extraordinaria. Pero Jurado, va más allá. Esta mujer está rota, es muy fría y distante. Y se encuentra con Jon. Alguien noble, cercano e inocentón que
atraviesa un proceso personal y profesional muy complicado, que se ve metido en un
embrollo considerable. Aquí comienza lo bueno. Son personas tan opuestas que
gracias a esa contraposición, el lector quiere saber más, para ver cómo van
a encajar. Además Gómez-Jurado lo desarrolla y lo describe
magistralmente, tanto, que cuando terminas de leer el libro, te apetece tomar un café con ambos. También me parece fundamental la evolución que se percibe a
lo largo de la lectura de Antonia y Jon. Es muy creíble y está muy bien escrita.
Pero no solo aparecen dos personajes: también hay
otros cuya relevancia es clave para el desarrollo de la narración, y que
condicionará e incluso ya ha condicionado la vida de más de uno.
Otro aspecto muy importante de los protagonistas es la
rapidez mental. Este thriller exige una agilidad mental muy especial,
generando situaciones de tensión y claustrofobia muy importantes.
A su vez, quiero destacar que estos personajes tienen
sus traumas, sus miedos e inseguridades. Son personas con más sombras que luces
que, en realidad, cargan con unos sentimientos de culpa voraces. Aquí veremos si
son capaces de superarlos o no.
Otro de los aspectos más relevantes de la obra son
las descripciones. Juan Gómez
describe todo: gestos, movimientos, colores, prendas, el rostro de los
personajes. No hay detalle que se le escape y favorece que el lector se meta en
la trama, empatizando con los personajes y sintiendo la historia como propia.
Me ha gustado muchísimo el uso de numerosa simbología relacionada con la purificación y el misticismo. Creo que le da un aire misterioso a la trama que provoca cierta inquietud a este thriller.
Continúo diciendo que la trama me parece brutal desde el principio. Ya el primer capítulo te
deja sin palabras y lógicamente no entiendes qué demonios está sucediendo. A gran velocidad, pero sin que el
lector se pierda, el autor comienza a mostrar sus cartas para que se comprenda
el puzzle que en un principio parece imposible de encajar. Es más, cuando crees
que tienes el puzzle completo, Jurado te sorprende, dejándote boquiabierto y,
sinceramente, con ganas de leer más.
Además, otro de los factores que favorece la
velocidad narrativa es el estilo en el que el autor redacta su obra. Ya he
comentado que el narrador es omnisciente y cuenta con todo lujo de detalles. A
su vez, incluye diálogos directos narrados en 1ª y en 2ª persona del presente,
a través de los que se conoce muchas situaciones de los personajes. Pero
también hay muchos diálogos indirectos con frases cortas, concisas y muy
concretas que me recuerdan muchísimo a Patria
de Fernando Aramburu. Eso le da mayor rapidez y le da un
toque original a la obra.
El lenguaje
es sencillo, directo y en numerosas ocasiones, irónico. Este recurso me ha parecido fundamental dentro de la novela. Ha habido determinados
párrafos en los que me he desternillado por las situaciones que el autor crea
en su ejemplar.
Otro aspecto clave, es la ambientación de la obra. La trama se desarrolla prácticamente en la
actualidad, en el 2018, pero en determinadas ocasiones realiza varios viajes al
pasado para comprender la situación presente de sus personajes. En realidad
todos somos consecuencia de un pasado que arrastramos y eso se refleja en
nuestros actos.
A su vez, en la obra aparecen numerosas calles de
Madrid, dando importancia tanto a la movilidad a pie, o en coche, dando un
extra de velocidad a la trama.
Por último quiero finalizar esta reseña con varias
reflexiones.
La primera es que hay que ser muy cuidadoso con la
interpretación literal o no de determinadas cosas y sobre todo de quien puede sufrir esas consecuencias ¿Os parecería justo que alguien que no tiene nada que ver con un determinado suceso pagase por los errores de los demás?
La segunda es la capacidad de superación
del ser humano. Creo que quedarse perpetuamente en el dolor no trae nada bueno, no aporta nada y sobre todo no permite avanzar. Como diría la Danza del fuego de Mago de Oz: " [...] No eches raíces en un sitio, muévete, pues no eres un árbol, para eso tienes dos pies". Lo importante es seguir a pesar del dolor, de las heridas, del pasado y del miedo. Aunque esa carga nos parezca atroz, siempre hay un motivo para seguir adelante, por mínimo que sea.
Y la última y más importante, ¿qué estarías dispuesto a hacer por tu familia? ¿Dejarías atrás tu orgullo y serías capaz de asumir las consecuencias aunque fuesen a tu contra? Reina Roja deja una interesante reflexión sobre el valor de la familia.
Gracias a Juan Manuel por regalarme el libro y gracias a Juan Gómez-Jurado por hacernos disfrutar más con una obra sublime, que hará disfrutar a los apasionados del thriller.
¡Nos seguimos leyendo, lectores! ¡Felices Fiestas! ^^
EDICIONES Y PRECIOS DEL LIBRO
Tapa dura (S.A. EDICIONES B, 568 págs, 2018): 20'90 €
Ebook (S.A. EDICIONES B, 2018): 4'74 €
EL AUTOR
Si queréis conocer más sobre Juan Gómez- Jurado podéis meteros haciendo clic aquí donde escribí una breve biografía del autor tras la reseña de Cicatriz, su anterior obra.
El autor también tiene una página web donde encontraréis más información sobre él.
Os dejo su enlace: http://juangomezjurado.com/
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